El presidente argentino Mauricio Macri, dijo estar «satisfecho» con el nivel de inversiones extranjeras que el país ha recibido desde que él asumió la presidencia. La participación extranjera en la economía de la Argentina, forma parte fundamental de su estrategia para reincentivarla sin por tanto aumentar el déficit o hacer explotar la inflación.
«Mi prioridad fue decir que en el segundo semestre la inflación iba a bajar drásticamente. Lo estamos empezando a cumplir. Mes a mes está empezando a bajar. Eso va a generar estabilidad para fortalecer el proceso de inversión, que es lo que va a generar trabajo», dijo Macri en una entrevista en el marco de la Cumbre Reuters 2016.
Según las evaluaciones del mandatario, la economía de Argentina crecerá un 3,5 por ciento en el 2017 gracias a las inversiones atraídas por el Gobierno y a la estabilidad generada por una menor inflación.
El gobierno de Macri también anunció la puesta en marcha de un ambicioso plan de inversiones públicas de casi 7.000 millones de dólares en infraestructuras, con el objetivo de darle un impulso al empleo y contrarrestar una pobreza que afecta según datos oficiales a un tercio de los argentinos.
«Mes a mes no hemos parado de crecer en la inversión (pública). Y ya estamos realmente a muy buen nivel de inversión y esperamos duplicar el año que viene», añadió el presidente.
En apoyo a las declaraciones del presidente, el Banco Central argentino, autoridad monetaria del país, recortó este miércoles la tasa a 35 días a 29,75% anual. Un comunicado oficial de esta instancia indica que los datos de inflación muestran «una disminución» con respecto a junio y julio.
«Esta tendencia descendente sugiere una baja significativa en la inflación de julio. Por su parte, indicadores de alta frecuencia sugieren que el proceso de desinflación continúa su curso en agosto».
Argentina cuenta con numerosos recursos naturales, una mano de obra altamente calificada, una agricultura orientada a la exportación, así como una infraestructura industrial bastante diversificada. Estos elementos deberían ser suficientes para mantener a flote la economía y un buen nivel de vida para todos los ciudadanos del país sudamericano. Sin embargo, a pesar de sus importantes activos naturales, el país se ha enfrentado a una inflación significativa, y a una inestabilidad monetaria considerable. La fuga de capitales fueron una de las características de la grave crisis financiera que perduró en la Argentina particularmente entre 1998 y 2002.
Radio Canadá Internacional con Reuters y Banco Central de la República Argentina.
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