En la ciudad, muchos de los contaminantes provenientes del escape de gases de los automóviles y camiones se acumulan en la nieve y se liberan en el medio ambiente durante el deshielo de primavera.
Investigadores de la Universidad McGill y de la Escuela de Tecnología Superior de Montreal encontraron que la nieve absorbe algunos contaminantes orgánicos tóxicos y cancerígenos llamados hidrocarburos aromáticos policíclicos.
Para determinar cómo la nieve capta las emisiones de los automóviles y camiones, los autores del estudio publicado en la revista Environmental Pollution la expusieron a los gases de escape en un globo de cristal hecho en su laboratorio.
Primera observación: los gases provenientes de motores de gasolina respondieron de manera diferente al contacto del frío y de la nieve según el modo de inyección del combustible en el motor.
Segunda observación: la nieve absorbe las partículas finas presentes en la contaminación del aire y cambia la concentración de diferentes nanopartículas. Estos contaminantes, los más pequeños que encuentra en el aire, fueron asociados con muchos problemas de salud.
Tercera conclusión: las bajas temperaturas y la interacción entre la contaminación atmosférica y la nieve aumentan la cantidad relativa de las pequeñas nanopartículas en el aire contaminado por encima de la alfombra de nieve.
Cuarta observación: una vez atrapados por la nieve, los contaminantes del aire pueden sufrir cambios químicos que dan lugar a otros contaminantes con diferentes grados de toxicidad y carcinogenicidad. Algunos compuestos, a veces más dañinos que los contaminantes iniciales, se volatilizan para volver al aire, mientras que otros se acumulan en la nieve y terminan en las aguas derretidas.
Estas liberaciones podrían en el corto plazo, causar un aumento en la concentración de ciertos contaminantes en el aire, el suelo y las aguas de la superficie hacia las cuales fluyen las aguas derretidas.
– Yevgen Nazarenko, un investigador en la Universidad McGill
La comprensión de la interacción entre los contaminantes y el medio ambiente, incluyendo la nieve, es importante para reducir el número de muertes prematuras relacionadas con la contaminación del aire en América del Norte.
Nazarenko y sus colegas creen que el aumento de la vigilancia ambiental podría permitir identificar los contaminantes más nocivos y en última instancia reducir su presencia en el medio ambiente, al modificar la composición de los combustibles y al optimizar los motores y catalizadores de los automóviles.
A nivel mundial, la contaminación del aire es responsable de aproximadamente 8 millones de muertes al año.
Radio Canadá
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