El tabaco mata anualmente a más de 7 millones de personas en todo el mundo, advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS) que hace un llamado a las autoridades para prohibir la promoción y aumentar el precio y la tasa de impuestos.
La OMS aprovecha del Día Mundial Sin Tabaco para publicar un informe de evaluación de la salud y los costos económicos del tabaquismo. Y, por primera vez, la agencia evalúa el impacto ambiental del tabaco en el mundo.
«El tabaco es una amenaza para todos nosotros», dice la directora general saliente de la OMS, Margaret Chan, en un comunicado. «Aumenta la pobreza, limita la productividad económica, motiva a los hogares a hacer malas elecciones de alimentos y contamina el aire en el interior», dijo.
El consumo de tabaco mata actualmente a más de 7 millones de personas al año, una cifra que casi se ha duplicado desde el comienzo del siglo 21, donde 4 millones de personas morían cada año a causa de este fenómeno.
El tabaco mata a la mitad de las personas que lo consumen, según el informe de la OMS, por lo que es la principal causa de las enfermedades no transmisibles prevenibles.
La pobreza como un factor de riesgo
Los pobres se ven afectados principalmente por el tabaquismo y es una causa importante de las disparidades de salud entre ricos y pobres, según la OMS. Ella precisa que más del 80% de las muertes atribuibles al tabaco se producirá en países de bajos o medianos ingresos de aquí al 2030.
La OMS estima que el tabaco podría matar a mil millones de personas en el siglo 21.
Perjudicial para el medio ambiente
El informe de la OMS dice que el tabaco también es perjudicial para el medio ambiente porque los residuos son los más prevalentes en el mundo. Ellos «contienen más de 7.000 productos químicos tóxicos que envenenan el medio ambiente, incluyendo carcinógenos.»
Los fumadores arrojan casi dos tercios de los 15 mil millones de cigarrillos vendidos cada día en el mundo en el medio ambiente, de acuerdo con el informe de la OMS.
El cultivo del tabaco también es parcialmente responsable de la deforestación, ya que un árbol se pierde por cada 300 cigarrillos.
La agencia promueve «medidas fuertes» para frenar el flagelo de fumar. Solicita la inclusión de la prohibición de la comercialización, la publicidad, y llama a extender la prohibición de fumar en lugares públicos cerrados y lugares de trabajo. Los precios más altos y los impuestos sobre el tabaco también sería una buena medida para desalentar la venta.
Fumar también causa pérdidas económicas de alrededor de 1400 mil millones en costos de atención médica y pérdida de productividad. Una cantidad que representa 1,8% del producto nacional bruto (PIB).
RCI/ Radio Canadá/Agencia France-Presse
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