La situación de las inundaciones podría agravarse en algunos sectores de la provincia canadiense de Ontario.
Según las autoridades, el nivel de las aguas del río Outaouais podría aumentar en la localidad de Pembroke, debido a que los reservorios de la región siguen registrando una crecida del caudal que reciben.
Los responsables confirmaron que el nivel de las aguas sigue siendo elevado en esa ciudad, ubicada a 150 kilómetros al noroeste de Ottawa, la capital de país.
En otros sectores, al agua ha continuado subiendo progresivamente y los responsables esperan que llegue a un pico este lunes 13 de mayo.
Una cuadrilla supervisa los sistemas para extracción del agua. THE CANADIAN PRESS/Justin Tang
En la ciudad de Gatineau, ubicada frente a la capital nacional del otro lado del río, en territorio de la provincia de Quebec, el nivel del agua creció entre el sábado y el domingo. Se trata de uno de los lugares más afectados por las inundaciones que se registraron en las últimas semanas.
Entre el sector de Hull, que forma parte de Gatineau, y la región de Hawkesbury, a 60 kilómetros al oeste de Montreal, las aguas parecen haber alcanzado su nivel máximo y las previsiones indican que deberían descender en los próximos días.
Por otro lado, en Maniwaki, el Centro Integrado de Salud y Servicios Sociales del Outaouais dispuso evacuar el centro hospitalario de cuidados de larga duración, conocido por sus siglas CHSLD, que alberga a unas 70 personas.
Ese nosocomio está ubicado sobre una calle que bordea el río Desert.
En algunos sitios sólo es posible desplazarse en vehículos especiales o adaptados. THE CANADIAN PRESS/Sean Kilpatrick
Durante las inundaciones que afectaron a diversos sitios en Ontario y Quebec en los últimos días, numerosas voces alertaron sobre la necesidad de llevar a cabo una planificación urbana que contemple la interdicción de construir viviendas y otros establecimientos en cercanías de los cursos de agua, que suelen desbordar cuando comienza la época de deshielo tras el invierno.
La propia capital nacional permanece en estado de emergencia, declarado el 25 de abril último, debido al desborde masivo de los ríos.
Como lo señalamos en uno de nuestros recientes artículos, las fuerzas armadas canadienses registraron un incremento de su participación para brindar socorro y asistencia a las numerosas personas afectadas por los desastres naturales, entre los que se cuentan las inundaciones.
En algunos casos las pérdidas son totales, mientras que en otros la gravedad de los daños producidos demandará mucho tiempo y la inversión de fuertes sumas de dinero, para proceder a las reparaciones necesarias.
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