El Consejo Canadiense de Radiodifusión y Telecomunicaciones (CRTC por sus siglas en inglés) dio luz verde a Space Exploration Technologies Corp (SpaceX), empresa propiedad de Elon Musk, en su plan de proveer internet satelital a los canadienses de las zonas rurales.
El plan de la empresa de Musk, propietario también de Tesla, es ofrecer internet de alta velocidad en lugares remotos del mundo. Esto será posible cuando Starlink, el servicio de internet que SpaceX está lanzando al mercado, envíe miles de pequeños satélites que orbitarán la Tierra, pero a una distancia no superior a los 550 km, lo que permitirá una mejor interacción con los computadores. Vale destacar en este punto que los satélites tradicionales de telecomunicaciones orbitan la Tierra a más de 20 000 kilómetros.
El CRTC explicó en su carta de aprobación que “el consejo recibió 2585 intervenciones sobre la aplicación de Space Exploration Technologies Corp. Luego de considerar los comentarios recibidos, el Consejo aprobó la aplicación y una licencia de Servicios Internacionales de Telecomunicaciones Básicas (BITS por sus siglas en inglés) fue adjunta”.
Ahora bien, en su carta de aprobación, el propio Consejo explica que la licencia otorgada no autoriza a una entidad a operar como un proveedor de servicio, agregando que éste debe ser sujeto a los requisitos reglamentarios, incluidos los vinculados a la propiedad y el control.
De acuerdo con un reporte de CBC, la mayoría de los comentarios realizados tras la aplicación fueron hechos por canadienses que viven en áreas rurales, que dieron respaldo a la petición de SpaceX, una empresa que ha enviado trenes de 60 satélites, casi dos veces por mes, desde mayo del año pasado.
No se sabe, sin embargo, cuándo los canadienses podrán tener el servicio activo. Según anunció la propia empresa, este otoño estará realizando pruebas beta en hogares que se han postulado como voluntarios, no solo en Canadá, sino en las regiones más al norte de Estados Unidos.
El plan de la empresa es ofrecer el servicio “a toda región poblada del mundo para el 2021”, según se lee en su sitio web. Por ahora, el propio Musk es prudente a la hora de hablar del alcance del servicio. En marzo de este año el empresario aseveró que el objetivo inicial era llegar a entre 3 y 4% de los clientes ubicados en zonas remotas, que en la actualidad tienen un servicio de mala calidad o que incluso no tienen ningún tipo de conectividad a internet.
El lanzamiento más reciente de los satélites se llevó a cabo el domingo, desde Cabo Cañaveral, a través del Falcon 9, el cohete reutilizable de la compañía de Musk.
Deployment of 60 Starlink satellites confirmed pic.twitter.com/QVv8m7gClz
— SpaceX (@SpaceX) October 18, 2020
En total hay en este momento 835 satélites Starlink alrededor de la Tierra, pero se prevé que en un futuro serán 12 000.
Críticas
En torno al plan ha habido ciertas críticas, especialmente de parte de organizaciones que han advertido que este tipo de satélites puede generar desechos espaciales y contaminación lumínica. Esto podría afectar las observaciones científicas.
No obstante, Musk aseveró vía Twitter, que será realmente difícil ver los satélites de Starlink, “pues estamos activamente trabajando con la comunidad vinculada a la astronomía para garantizar que incluso los telescopios más sensibles puedan trabajar bien y que el progreso científico no se vea interrumpido”.
La empresa que eventualmente dará el servicio, Starlink, asegura que los satélites no generarán desecho espacial. Foto: Starlink.
Starlink explica en su sitio web que sus satélites tienen un sistema de propulsión que les permitirá desorbitar una vez termine su función y que en el caso de que el sistema no funcione, los satélites deberían quemarse entre uno y cinco años en la atmósfera de la Tierra.
Fuentes: Consejo Canadiense de Radiodifusión y Telecomunicaciones, CBC News, Starlink, Twitter
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